Suena de otros tiempos... pero hace falta hoy.

De Manuel Alegre, vía Liberdade, un poema, Trova del viento que pasa:

Pregunto al viento que pasa
noticias de mi país
y el viento calla la desgracia
el viento nada me dice.

Pregunto a los ríos que llevan
tanto sueño a flor de las aguas
y los ríos no me sosiegan
llevan sueños, dejan amarguras.

Llevan sueños, dejan amarguras
ay ríos de mi país
mi patria a flor de las aguas
¿para dónde vais? Nadie lo dice.

Si el verde trébol deshojas
pide noticias y dí
al trébol de cuatro hojas
que muero por mi país.

Pregunto a la gente que pasa
por qué va mirando al suelo.
Silencio -es todo lo que tiene
quien vive en la servidumbre.

Vi florecer las verdes ramas
directas, vueltas al cielo.
Y a quien le gusta tener amos
vi siempre con los hombros encogidos.

Y el viento no me dice nada
nadie dice nada nuevo.
Vi mi patria clavada
en los brazos en cruz del pueblo.

Vi mi patria en la orilla
de los ríos que van al mar
como quien ama el viaje
pero tiene siempre que quedarse.

Vi naves que iban a partir
(mi patria a flor de las aguas)
vi mi patria florecer
(verdes hojas, verdes amarguras).

Hay quien te quería ignorada
y hablé patria en tu nombre.
Yo te vi crucificada
en los brazos negros del hambre.

Y el viento no me dice nada
sólo el sislencio persiste.
Vi mi patria parada
en la orilla de un río triste.

Nadie dice nada de nuevo
si voy pidiendo noticias
en las manos vacías del pueblo
veo mi patria floreciendo.

Y la noche crece por dentro
de los hombres de mi país.
Pido noticias al viento
y el viento nada me dice.

Mas hay siempre una candela
dentro de la propia desgracia
hay siempre alguien que siembra
canciones en el viento que pasa.

Lo mismo en la noche más triste
en tiempos de servidumbre
hay siempre alguien que resiste
hay siempre alguien que dice no.

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