El mundo está lleno de propósitos olvidados
El mundo está lleno de propósitos olvidados, abandonados. Anegan las vías públicas y los pasillos de las viviendas. Llenan los estantes y los rincones, se esconden bajo los muebles como las pelusas y el polvo.
En los últimos tiempos se está detectando cada vez mayor presencia de estos propósitos perdidos en los lugares vacacionales, en los hoteles y en las playas, en las pistas de esquí y en las pequeñas ciudades pintorescas. Se ha dado la alarma, porque ponen en peligro la integridad de los monumentos históricos y su belleza.
Lo más grave es que ya se están recibiendo noticias de que en los senderos de montaña y en las selvas se están comenzando a encontrar muchos, sobre todo alrededor de las sendas marcadas en las guías de viaje.
Los últimos avisos son más preocupantes. En alta mar, bajo las rutas de los grandes aviones transoceánicos, se han avistado grandes salpicaduras en la superficie, como las producidas por objetos que caen desde gran altura. Algunos las atribuyen a propósitos que, de haber sobrevivido a la caída de ocho mil metros, perecen en el choque o por cansancio e hipotermia en las aguas profundas.
¡Última noticia! Avispados exploradores desde distintos desiertos notifican que han sufrido desperfectos en sus tiendas de acampada por el impacto de propósitos olvidados que el viento arrastraba a gran velocidad.
31/7/2005 Hare
... en las lejanas llanuras del sueño encontré algunos de los míos: eran muy antiguos, de cuando los tenía continuamente (ahora ya casi no los tengo, dejo la vida correr o me muevo por la vida, a veces hago un plan y lo llevo a efecto... Ahora que lo pienso: un plan que no se ha intentado llevar a cabo es como un propósito olvidado...)
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