viernes, 4 de mayo de 2007

Las otras fotos...

Nos siguen,
esa es la sospecha
...

...
sentimos la presión
en la carretera
...


...
desde el balcón miramos,
escondidos,
y vislumbramos la presencia que nos aterra
...


...
¿por qué quemaron la papelera?
...


...
¿sabremos a dónde dirigirnos?
...


...
al final,
junto al mar,
miramos el sol ponerse
bajo la lluvia,
resguardados en el coche,
tras el cristal.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Necesito el final: ¿Que pasó con el coche perseguidor?

No se puede dejar a las personas con este "suspense"...

Profesor Portillo dijo...

Por supuesto, logramos despistarlos.
Todavía andan dando vueltas por la ciudad en la que ya no estamos, recibiendo órdenes y reprimendas por su moderno teléfono móvil.

Profesor Portillo dijo...

Aunque hoy, durante más de cien kilómetros, he avistado a cada rato coches similares que me seguían de lejos y se turnaban...
Distintas marcas, pero formas y colores similares.
Iba solo. No pude sacar fotos.

Anónimo dijo...

Eso ya se llama manía persecutoria.

Anónimo dijo...

Puede ser, pero ya lo tenemos a buen recaudo...

ja, ja, ja...

¡No le sirvió de nada!

Anónimo dijo...

Pues lo siento mucho.

Le estaba tomando cariño...